La costa de malagueña, con una extensión de menos de 200km, bañada por las aguas del mar Mediterráneo, a lo largo de los años, ha sido objeto de una intensa urbanización y desarrollo, lo que ha dado lugar a problemas de corrupción urbanística y deterioro del entorno natural. A día de hoy, quiero creer que se han implementado políticas y medidas de conservación para proteger y restaurar los ecosistemas costeros. Pese a esto, es posible disfrutar de hermosas playas, practicar deportes acuáticos y explorar la diversa flora y fauna costera.
Son pocas las zonas que permiten disfrutar de un entorno de naturaleza, pasamos a descubrir algunas de ellas.
Ubicado en la Costa Oriental de Málaga, compartiendo con Granada, en alrededor de 12km de extensión, nos encontramos con este enclave natural.
Pequeñas calas se entrelazan con majestuosos acantilados y terrazas de cultivo. Verdaderos rincones naturales de belleza excepcional, con dimensiones reducidas, lo que les otorga una atmósfera íntima y serena. Explorar estas aguas revela un fascinante mundo submarino, con grutas submarinas como las cuevas de los Genoveses o de la Cajilla, cueva de los Piratas, cueva de las Palomas, entre otras. Paisaje enérgico, bello y en ocasiones tranquilo.
Como aspectos positivos, destacar la vegetación que la envuelve, sus aguas transparentes, un paisaje sin igual, todo un tesoro para los amantes del kayak y el snorkel.
También hablaremos de aspectos negativos. Turismo masivo en temporada, lo que conlleva saturación de aparcamiento y masificación de las playas.
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PLAYA DE WILCHES O VILCHES
Un lugar que te cautivará con su encanto íntimo. Con solo 150 metros de longitud y 20 metros de ancho, te ofrece la privacidad y serenidad que buscas. A pesar de su cercanía a la carretera N-340, esta playa suele estar pacífica y alejada del bullicio. Con fácil acceso a pie, es el lugar perfecto para desconectar y disfrutar de la belleza natural que te rodea.
Nosotros en ocasiones la utilizamos como punto «parada de descanso» debido a su buena conexión, cuando estamos por la zona.
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Sin duda una playa que nos impresionó bastante. ¿Por qué?
- Está muy cerca de la ciudad.
- Las veces que hemos estado no había demasiada gente, esto puede ser debido al que el aparcamiento esta limitado.
- A pesar de ser una «playa urbana» con servicios como merendero y parque infantil, tiene un encanto propio.
- Dispone de un sendero con un recorrido de unos 22km que llega hasta Olías. Personalmente recomiendo estudiarlo bien ya que carece de «encanto» y no es precisamente corto. Tenemos un paseo costero, ideal pasear o correr.
- Zona apta para buceo ya que dispone de zonas rocosa muy ricas en cuanto a fauna y vegetación se refiere.
¿Y algo negativo? Pues sí.
- Ambiente fiestero, aun no estando excesivamente saturada, el día que estuvimos, se palpaba un ambiente juvenil «característico».
- Una fabrica de cemento trabajando desde inicios del S.XX le da el toque más amargo a la zona. Un increible mounstro que nos impacto nada más llegar.
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Hablar de Cabo Pino es hablar de Las Dunas de Artola. Un impresionante paisaje natural. Rincón paradisíaco que se caracteriza poseer unas extensas playas de fina arena dorada y acompañadas de una extensión de dunas costeras, que ofrecen un escenario único para los amantes de la naturaleza y el turismo sostenible.
Estos Monumentos Naturales se encuentran dentro de la Red de Espacios Naturales Protegidos de Andalucía (RENPA). Conservadas en su esencia, han resistido la influencia del turismo y la urbanización, destacando por su riqueza biológica y geomorfológica. Estos espacios brindan un ambiente de alto valor ecológico, invitando a sumergirse en su belleza sin igual.